Las Zozobras del Milenio.
Hace años, incluso mucho antes de que se hicieran más de 11 reuniones sobre las amenazas que penden sobre la cabeza de la humanidad, se editó una revista, de estas de hojas grandes y flácidas, que se tituló así, Las Zozobras del Milenio. Sería antes del año 2000, muchos meses antes de que se empezara a preocupar sobre si los ordenadores resistirían el paso de los 1900 y pico a los 00 o se colapsarían y mandarían la hoja del excel de las nóminas al carajo más puro. Bueno, no ocurrió nada, y sobrevivimos. En realidad, estos miedos se hacen mundiales porque los que viven en ciudades no saben que hay mucha gente que vive de los árboles, y bajo los mismos, y estos no cobran de ningún excel. La realidad es que suele ocurrir que estos que viven bajo los árboles no suelen saber que son unos privilegiados, y hacen intentos para ir a las ciudades de gente a la que no conoce para prosperar. A veces hay muchas pateras volcadas en medio de estos intentos, o como el caso de aquella señorita que, perseguida por agentes hispanos de la policía fronteriza de los Estados Unidos, fue llevada por la corriente del río Bravo. Ah, el colmo de la pobreza, y de la podredumbre, es que no vivas precisamente en una ciudad llena de nóminas hechas de excel, pero no tengas ningún árbol bajo el que cobijarse. Ocurre en muchos sitios de África. Ocurre, incluso, en Guinea Ecuatorial. Y la leche más agria es que no tengas agua potable, como también nos ocurre en nuestra Guinea.
La verdad es que escribo esto porque suenan tambores y sirenas de guerra, y da rabia porque nos sentimos desamparados y estafados. Y todo esto porque los que tienen el poder para decidirlo lo hacen por sus conveniencias, como han estado machacando a los palestinos porque esto le conviene a dos o tres cabezas en Israel, o que ya puede saltar el mundo en pedazos porque Trump, Nicolás Maduro, Vladimir Putin, el líder espiritual de donde sea, y cualquier otro sátrapa lo ve conveniente a sus intereses, y a al resto que les parta el rayo que ellos son capaces de lanzar. Sé ahora mismo, tal como se ha puesto el mundo, que muchos se guardan mucho de exteriorizar las ganas que tendrían de retorcerle el pescuezo a cualquiera de lo que están en la lista si tuvieran la menor oportunidad. Ya saben, todas estas ansias vengadoras se acumulan, y cada uno acaba pagando sus nefastas consecuencias. O sea, el mundo, la naturaleza, o la Providencia, nos pide que nos refrenemos, que no es un asunto nuestro. Y esto es, en parte, una forma de engaño. Porque lo que debería ocurrir es que nos dé la posibilidad de retorcerles el cuello a estos desgraciados y decidir por nuestra cuenta si lo hacemos o no.
Bueno, no era de lo único de lo que debería hablar. 37 annoboneses estuvieron en la cárcel porque en su isla una empresa del general presidente Obiang empezó a utilizar explosivos en una mina o cantera cercana a sus residencias y cometieron la "torpeza" de protestar por ello. Ellos saldrán de la cárcel muy, pero que muy tocados, y sería la hora para saber qué hacen con las personas retenidas en las cárceles guineanas, que muchas salen con muchísimas pruebas de que no están en sus cabales. Lo que sería un juicio justo para todos sería que los desgraciados que quieren ahora lanzar sus bombas se pongan en serio en este malvado propósito y no dejen piedra sobre piedra, mandándonos al carajo irremediable. Si quedan vivos estos líderes, ya verían lo que harían con su miserable vida. Ya ven, nos han empujado a ello.
Barcelona, 23 de junio de 2025
PostData: La realidad es que no hay posdata alguna. Y que les den!!
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